Author: Anfechen
•12:25
El frío empaña las ventanas compitiendo y ganándole la partida a mi débil aliento, mis manos se congelan y un púrpura suave se apodera de mis uñas...
Pero el frío físico es tolerable comparado con la forma en que tirita mi alma cuando te extraño, cuando recuerdo que hace unos dos mil días tu corazón latía como el mío, y tu sonrisa me sacaba doscientas a mi. Cuando habitábamos el mismo pedazo de mundo, en una única dimensión y podíamos hablar por cualquier tipo de medio.
Ahora, sólo me queda escribir, confiar en que el aire o donde quiera que estés, donde sea que permanece la energía de los que mueren...que en ese sitio sin tiempo ni lugar, exista una conectividad medianamente decente para leer estas líneas...

Anfechen
|
This entry was posted on 12:25 and is filed under . You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed. You can leave a response, or trackback from your own site.

0 comentarios: